El sábado 02 de febrero en el Circo Suárez, en Sonora en pleno espectáculo circense, Sergio, un tigre de bengala de 6 años atacó al domador, Alexander Crispín Suárez que estaba con él. Debido a que la herida fue directa en el cuello, el domador perdió la vida. De inmediato aislaron a Sergio y decidieron trasladarlo al  Centro Ecológico de Sonora.

Guillermo Soto Montenegro, el director del Centro comentó que el tigre de 6 años de edad,  junto a su pareja “La Princes” quedarán en un lugar alejados del público.

“Los tigres van a estar muy inquietos al principio porque van a estar solos, van a extrañar los aplausos, los gritos y el barullo de la gente a lo que estaban acostumbrados”, expresó el funcionario.

Es momento de reflexionar y tomar cartas en el asunto. El problema radica en la necedad de la gente en usar a los animales en circos. Felinos como Sergio necesitan estar en su hábitat, al igual que demás animales que explotan y maltratan en diferentes espectáculos.

Varios medios acusaban a Sergio como un animal peligroso y lo golpearon demasiado durante el sábado cuando ocurrió el incidente. ¿Cuántos casos más se necesitan para que regresen a todos los animales a su hábitat y los señalen como asesinos? ¿Por qué no hacerlo sin necesidad de un accidente?