¿Tu perro le teme a los cohetes y ruidos fuertes?
Este tema nos puede parecer exagerado o chistoso pero para tu perro puede ser fatal, al grado de poner en riesgo su vida. Algunos perros suelen presentar desde miedo y estrés hasta una ansiedad intensa que tenga como consecuencia la muerte.
Los cohetes, truenos y balazos son algunos de los ruidos que los hacen esconderse debajo de la cama, temblar, ladrar con mucha insistencia o tener una crisis de pánico donde rompen cosas, salen desesperados a la calle, se avientan por las ventas, etc.
¿Cómo podemos ayudar a nuestros perros a no presentar esta crisis?
Antes que nada, nunca lo regañes por romper cosas o intentar huir debido a sus crisis porque lo único que causaras es que su temor aumente, además de estresarse por los ruidos se estresará por el miedo a que lo regañes.
1.- Identifica el ruido que le provoca estrés o miedo. Una vez que lo tengas identificado, en el momento que lo escuches trata de evitar que tu perro entre en pánico con distractores como darle inmediatamente un alimento que disfrute mucho (un trozo pequeño de salchicha de pavo baja en grasa o una cucharadita de mantequilla de maní) o juega con él con algo que lo entretenga mucho. Procura hacerlo siempre que escuches los ruidos para que poco a poco relacione los ruidos con algo positivo y entonces en lugar de preocuparse por los ruidos estará atento a que le des algo rico o juegues.
2.- También trata de que los ruidos dejen de tener importancia para él, acostumbrándolo a ellos. Esto lo puedes hacer consiguiendo una grabación de los ruidos que lo afectan, pónselos con un volumen bajo y mientras hagan una actividad que disfrute mucho o dale un premio siempre y cuando no reaccione alterado; sube el volumen gradualmente y prémialo si se encuentra tranquilo.
Es muy importante que no lo premies o mimes cuando esté atemorizado porque si no estarás diciéndole que tiene razón en ponerse así y lo vera como un incentivo.
3.- Si tu perro sigue teniendo crisis de pánico después de probar lo anterior, llévalo con su veterinario para que le recete de ser muy necesario un calmante para esos momentos.